Presentación

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Hace un puñado de años que quería ofrecer un blog que concentrase la mayor parte de mis artículos, conferencias y algunos estudios
seleccionados por su interés más general. También, ofrecer al mismo tiempo, mis últimas aportaciones de manera que este espacio se
mantenga permanentemente actualizado.

Pero las urgencias y necesidades no lo han hecho posible hasta ahora, y la causa de hacerlo realidad es la nueva edición actualizada de La
Sociedad Desvinculada. Dar a conocer esta novedad ha sido el punto de apoyo que me ha conducido a liarme la manta a la cabeza y empezar. Por tanto, tratar sobre la Sociedad Desvinculada, que es lo que aparece inicialmente en este espacio en la red, es la causa inmediata para construir progresivamente la  recopilación de mis textos, ahora dispersos en el tiempo y entre distintos medios.

Y digo progresivamente por qué a pesar de que no es mi oficio, ni nunca he tenido la pretensión de que lo fuera, la realidad es que he escrito mucho y por ello la recopilación no es cuestión de cuatro días. No soy un escritor en el sentido literario del término -esto es obvio- pero sí un comunicador, porque lo que me mueve es hacer partícipe a los demás de análisis, diagnósticos y conclusiones, referidas a la realidad en la que vivimos. Y hacerlo desde la razón y la pretensión o búsqueda de la verdad, lo cual tiene su riesgo en pleno imperio del emotivismo de la cancelación.

Y digo progresivamente por qué a pesar de que no es mi oficio, ni nunca he tenido la pretensión de que lo fuera, la realidad es que he escrito mucho y por ello la recopilación no es cuestión de cuatro días.

No soy un escritor en el sentido literario del término -esto es obvio- pero sí un comunicador, porque lo que me mueve es hacer partícipe a los demás de análisis, diagnósticos y conclusiones, referidas a la realidad en la que vivimos. Y hacerlo desde la razón y la pretensión o búsqueda de la verdad, lo cual tiene su riesgo en pleno imperio del emotivismo de la cancelación.

Foto Miró

Este espacio virtual contiene lo referido a la sociedad desvinculada, y sus desarrollos posteriores: una Nueva Teoría Crítica, el desplazamiento del conflicto en torno al modo de producción, al conflicto por el modo de vida, a causa de la alianza objetiva entre el liberalismo cosmopolita de la globalización y el progresismo de género, y finalmente sobre el estadio en
el que estamos, el de la formación de la dictadura del feminismo de la lucha de géneros.

Pero, como es lógico, esta es solo un área de interés; hay otras. Por descontado el de la fe en Cristo, el cristianismo y la Iglesia, la juventud y la educación, pasando por la crisis del medio natural y del clima, la tecnología, sobre todo centrada en el sector agrario, la energía y la I+D, la
economía de la que me interesa especialmente los modelos de crecimiento y la Nueva Economía Institucional, la sociología sobre todo referida al capital social y el capital humano. La dimensión moral de todo ello y la narrativa histórica de las ideas y de los hechos son otros temas frecuentes.

El comentario político constituye de por sí todo un amplio capítulo. De hecho, empecé a escribir en los años setenta por una razón política, y también por una exigencia técnica. Mi primer libro, junto con Ernest Sena i Frederic Miralles, La Catalunya Pobra, fue la introducción en nuestro país del análisis territorial de la pobreza.

También me ha parecido interesante enlazar con los proyectos en los que ando metido o que apoyo, que es una forma de promoverlos y así, quizás, algunos de vosotros lleguéis a interesaros por ellos.

Mantendré la actualidad mediante la publicación de mis artículos semanales y en algún caso también introduciré algún post específico.

Tengo previsto un boletín semanal con las novedades porque me parece práctico para quien esté interesado.

En todo caso, espero vuestras opiniones amables o críticas, que serán sin duda una fuente de conocimiento para mí. Siempre que sea necesario responderé por orden de llegada y pidiendo vuestra compresión porque el tiempo del que dispongo es reducido.

Mi deseo es que este blog sea un servicio a la comunidad y un testimonio del tiempo vivido, ya notoriamente largo. Al menos este es mi propósito, con la esperanza que, cuando me llegue el momento de pasar cuentas ante Aquel a quien nadie engaña, no me sea de aplicación lo que Albrecht Haushofer escribió en sus Sonetos de Moabit, el 20 de julio de 1944, en su celda a la espera de ser ejecutado por los nazis

Me acusa el corazón de negligente
Por haberme dormido la conciencia
Y engañar a mí mismo y a la gente;
por sentir la avalancha de inclemencia
Y no dar la voz de alarma claramente.
Todo esto sí exige penitencia.

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